-Señor, permitame decirle que es una gran idea mover parte del gobierno de la ciudad a Barracas. Estar al lado del Borda y el Moyano es una clara demostración de que la ciudad no se termina en la avenida Santa Fé.
-¿Cómo Barracas? No, no, específicamente dije Barrancas, barrancas de Belgrano. ¿Quién quiere mudarse a Barracas? ¡Por dios! ¡Paren eso!
-Pero señor...ya fue anunciado...
-No, no, fue un error de imprenta. ¡Que alguien haga algo ahora!
-Pe...pe...pero...señor...es imposible...
-¡No! ¡Oh dios no! ¿Por qué a mí?
-Vamos señor...no se ponga así...no es tan grave...no llore...le quedan feas esas lagrimitas.
-¡Oh de iumanity!
-Vamos, señor...ya es un chico grande...los chicos grandes no lloran...tome mi pañuelo...ahora soplamos fuerte y nos sacamos esos moquitos...¡Muy bien! Tome un palito de la selva.
-¿Puego agarrar dos?
-Sí señor, claro que sí.
3 comentarios:
Leyendo La breve vida feliz de Francis Macomber me acordé de usted. Creo que tengo problemas.
abrazo
no le veo el chiste a reirte de quien gobierna la ciudad,
sobretodo si esta "presidenta" que tenemos es una broma de mal gusto, y teniendo en cuenta que vos NO vivis en capital... opinologos sobran.
me parecia que hacias humor inteligente, pero parece que me equivoqué
Cobras algun subsidio? o encima lo haces gratis?
Boo: Ni uno, es siempre mejor que me recuerde por Hemingway y no por Paulo Coelho.
Ano: Tenés razón, no hay que burlarse de los retardados. A veces me olvido.
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